miércoles, 23 de septiembre de 2009

Self-injury

Después de mes y medio de relativa calma en esta forma de expresión de mi trastorno... he vuelto y con más saña que antes. Ahora no solo desgarro mi piel sino que la rocío con alcohol para que duela más. ¿Será masoquista? ¿Estará loca la pequeña Marina? Eso se preguntaron mis progenitores cuando se enteraron (a través de mi tía, ya que en 4 años que llevo haciéndolo no han sospechado ni una vez, este par no pilla ni un catarro) y decidieron mandarme al psiquiatra. Tengo cita el 23 de octubre, ya contaré cómo me fue en caso de que vaya a ir... No, damas y caballeros, no disfruto del dolor. No, morbosos y morbosas, no lo hago por llamar la atención, ni en sitios visibles, eso es de niñata caprichosa que quiere que mami se entere de su existencia. Y no, tampoco lo hago como intento de suicidio (demasiadas posibilidades de fallo). Ante todo, no se puede definir la auto-mutilación, ya que para cada persona significa algo diferente. Sólo puedo tratar de explicar los efectos que tiene en mí: 1) Anestesia del dolor emocional. 2) Relajación y calma, sobre todo cuando sobreviene a una situación de stress importante, como una discusión o un disgusto. 3) Control. Ya que hay muchas circunstancias que se escapan a mi control, por lo menos sé que puedo dominar mis sensaciones corporales. 4) Nada. Vacío. Encefalograma plano. Se fue el sufrimiento. Tanto físico como emocional. Ya puedo dormir. Buenas noches...

domingo, 20 de septiembre de 2009

¡¡¡Mentiras, mentiras, todo mentiras!!!

Por eso no quería que se relacionara a Marina con Dancer (somos la misma persona). Porque el hecho de saber que mis conocidos leerían esto me limitaría mucho a la hora de expresarme, de dar rienda suelta a mis pensamientos más oscuros, me empujaría a maquillar mis actos, y creedme: tengo mucho que confesar, empezando por mis creencias en torno a la anorexia nerviosa... incluso a la bulimia nerviosa. Sí que son estilos de vida y no enfermedades. Solo se convierten en enfermedades cuando los que las sufren o las disfrutan pierden el control, o más bien quieren perderlo, o se dejan llevar por el trastorno de alimentación para no ocuparse de sus VERDADEROS problemas, igual que el alcohólico se da a la bebida para dejar de recordar que su mujer le pone los cuernos con el panadero de la esquina. ¿Por qué tanta falsedad? ¿Por qué tantos consejos sobre alimentación sana? ¿Por qué mis reprimendas a los que anteponen a Ana a su salud? Simplemente... por evasión de responsabilidades. Porque no quiero sentirme culpable si a alguien le da un infarto por seguirme en un ayuno, menuda estupidez... como si cada quien no fuera dueño y responsable de sus propios actos y no supiera a qué atenerse. Como si las pacientes de unidades de trastornos alimentarios que son internadas no empezaran a comer normal al tercer día de ingresar allí, cuando horas atrás afirmaban a grito pelado que nada ni nadie les haría engordar. Como si no eligiéramos tener anorexia. Ok, no se elige el trastorno mental, no se elige odiarse tanto a uno mismo, no se elige pagar con el cuerpo los dolores del alma, no se elige darse asco hasta el punto de querer encoger esos apéndices de grasa tan desagradables, pero sí se eligen los hábitos. Se elige la manera de afrontar estos pensamientos. TU ELIGES METERTE LOS DEDOS en la garganta para expulsar esa hamburguesa en vez de haber cenado una ensalada, NO CULPES a la sociedad, a tu padre que te pegaba y te llamaba gorda de pequeña, a las revistas de moda, o a Coco Channel que Dios la tenga en su gloria. Tú y solo tú has decidio restringir tu alimentación, condicionado por multitud de factores, pero lo has elegido tú teniendo muchas otras opciones. Así que no vengas a criticarme por colaborar en la degeneración de la mente adolescente, en muchos casos tan vacía que no se le ocurre otra cosa que dejar de comer para entrar en el mundo de las princesas de porcelana. Un mundo sugarfree y 99% libre de grasa.

martes, 15 de septiembre de 2009

No quiero acabar así...

La he cagado, y bien cagada: ensaladilla rusa, panecillos de ajo y una manzana. Ya sabía yo que me estaba yendo demasiado bien... ese cacao con leche fue un mal presagio, no tendría que haber cedido, ahí empezó todo. Casi 5 días de hambre a la mierda en 10 minutos. El éxito es efímero, ya me quedó claro.
Ahora me toca volver a empezar, y me veo sin fuerzas para ello... no me refiero a fuerzas físicas, que me sobran, sino a la resistencia psicológica precisa para seguir adelante después de este estrepitoso fracaso. Menos mal que tengo a mis mosqueteros que sé que con cuatro palabras me harán sentir mejor que cualquiera de mis amigas tras una hora de charla. Gracias por estar ahí...

Tabla de obesidad por estados en USA

Tabla de obesidad por países (IMC superior a 30)

5 días sin comer

Sin comer pero no sin beber. Efectivamente, hoy rompí mi ayuno con un vaso de leche con cacao en polvo, pero no piensen que fue algo impulsivo, simplemente me levanté muy rara. Y ante todo, quiero evitar los atracones, y me da la sensación de que en cuanto me pongan un plato delante me abalanzaré sobre él, y después de tanto esfuerzo, me daría mucha rabia meter la pata así. Dado que he estado 4 días completos sin alimentarme, ahora me propongo estar 5 más, es decir, del miércoles al domingo ambos inclusive, para el lunes tomar un pequeño descanso (¿zumo? ya veremos). Hay un asunto, y es que el sábado he quedado para ir a bailar a una discoteca, y no sé si después de una semana de ayuno estaré en condiciones... creo que me tomaré un par de cápsulas de guaraná, que tienen bastante cafeína, para tener energía porque si no no aguanto yo en pie hasta las 7 de la mañana, que es lo que pretenden mis amigas... otras que tal bailan, parece que solo saben hablar de comida y de salir a comer, como si no hubiera otro entretenimiento en este planeta. Me despido aunque intentaré redactar otra entrada en unas horas, quiero dejar constancia de todas las sensaciones que este ayuno está produciendo en mi cuerpo y en mi mente, para que los que se porpongan realizar uno, sepan a qué atenerse, y los que ya lo hayan hecho, comparen experiencias y me comenten lo que sintieron. Es una contradicción constante, por un lado me encuentro muy bien y no tengo nada de hambre, pero por otro, es como mi subconsciente me pidiera comida, de hehco esta noche soñé que me pegaba un atracón de bollos y chocolate. Y sí, tengo mareos pero no son nada del otro mundo, ni peores que los que tenía cuando hacía dieta hipocalórica, más bien me siento liviana y eso sí, muy atontada: apenas puedo mantener la concentración en la lectura, aun siendo ociosa (estoy releyendo El código Da Vinci). Y con esto y un bizcocho...

Mi talla

Como muchos de los que venís no sois españoles y no os manejáis con las tallas de aquí, decidí hacer una seleccion de fotografías de ropa que encontré por google de la talla 36.
Hoy me llamaron gorda en el chat porque por lo visto en México la 36 es como la 46 española, o sea bastante amplia. Tengo el pantalón blanco de la foto, ahora sí podéis llamarme foca con conocimiento...

lunes, 14 de septiembre de 2009

96 horas de ayuno

Entrando ya en el quinto día... guay qué rápido y qué lento pasa el tiempo a la vez.. quiero decir, que los días se me están haciendo eternos, pero a la vez me está resultando muchísimo más fácil de lo que me esperaba, exceptuando los ataques de ansiedad y hambre del tercer día. No quiero decir que dejar de comer sea fácil, solo afirmo que es fácil para mí... y esto no significa que sea poseedora de una gran fuerza de voluntad, más bien al contrario: soy incapaz de llevar una dieta sana y una tabla regular de ejercicio durante más de dos semanas. Opto por lo radical, que es dejar de comer o comer muy poco, o hacer ejercicio de forma desmesurada, o vomitar la comida non-grata. Todos me preguntáis la duración de este ayuno, como si fuera algo que yo supiera, o tuviera planeado... lo cierto es que no, que si por mi fuera no comería nunca más, sé que eso es imposible ya que me ingresarían y eso es lo último que deseo, solo pido que me dejen adelgazar hasta desaparecer, no me meto con nadie así...

4º día de ayuno

Ayer fue un día horroroso. Hambre, ansiedad, mareos, litros y litros de agua con las consecuentes náuseas y dolor estomacal, hambre de nuevo y malestar general. Sin embargo hoy me encuentro genial, he dormido muchísimo, al contrario de lo que me suele suceder cuanado ayuno, mi piel no está seca, ni pálida, ni tengo que ocultar las delatoras ojeras... Voy tan tan bien que estoy pensando en darme una pequeña pausa el jueves -a fin de cuentas, incluso el Señor descansó el 7º día- pero de ninguna manera dejar el ayuno, solo un paréntesis para seguir muchos días más con más fuerza. Sé que si continúo así por tiempo indefinido me desmayaré o me dará una bajada y entonces me harán comer mucho más de lo que comería yo por mi propia mano... Así que no sé, según cómo me encuentre. Tampoco quiero planear mucho, quiero vivir el día a día y pensar en hoy: hoy no tengo hambre, ahora no siento ansiedad, y en este momento me encuentro en paz y muy relajada. Si dentro de 5 minutos me entra la tentación de abalanzarme sobre las pastas de té que mi madre ha comprado para mí, ya me enfrentaré a ello dentro de 5 minutos. Y si mañana me desmayo delante de alguien, ya me inventaré mañana la excusa.... vivir con miedo de qué pasará es inútil, te impide disfrutar el presente, y mi presente consiste en un atontamiento mental bastante agradable, charlas con buenísimos amigos como son Lore, Raúl, Sole, Candy y alguno más que me dejaré (perdonen mi memoria, mi capacidad de concentración está menguando a pasos agigantados) y, en fin; todo el cariño que se puede transmitir a través de una pantalla de ordenador... (Perdona María por haber subestimado el tuyo, sabes que son neuras mías pero que te valoro un montón, no te me ralles!)

domingo, 13 de septiembre de 2009

Hipocresía en Sin tetas no hay paraíso

Hoy emitían en España el primer capítulo de una segunda parte que se han inventado de la telenovela, originalmente colombiana (creo), Sin tetas no hay paraíso.
Las amigas de la protagonista, chicas muy guapas pero entraditas en carnes (sobre todo Cris, la actriz porno, y Vane, la ex-cocainómana) aparecen en esta temporada con bastantes kilos menos, y la verdad es que lucen un tipazo. No voy a entrar en detalles del forzadísimo guión y los pésimos actores nuevos que han contratado, en lo mal que le queda a Catalina, la prota, el pelo oscuro y el eyeliner negro, sino en la hipocresía que demuestran estas actrices y en lo que me he reído al recordar una entrevista que dieron al periódico "20 minutos" (si no recuerdo mal, fue hace un año o así, cuando salió la serie en España): "...se abusa del quirófano hoy en día, nostras jamás nos operaríamos de nada, creemos que las mujeres deben aceptarse tal y como son, belleza interior blabla, no hacemos dieta no creemos que por ser actrices se nos deba exigir adelgazar..."
¡Venga ya! Qué ideales más inamovibles que tienes, o ¿solo querías quedar bien en el periódico? Te dicen que bajes 8 kilos, y los bajas porque tu sueldo depende de ello, no te culpo, pero no vayas por ahí lanzando mensajes de "acéptate tal y como eres" porque me das asco. Y ahora vete a tomar una CocaCola Zero y a dar otra entrevista sobre el hambre en África.
Las fotos son de las dos actrices que estaban más gorditas.

sábado, 12 de septiembre de 2009

48 horas de ayuno

Dicen los textos que a partir del tercer día de ayuno, empezamos a liberar una sustancia conocida como cetonas, lo que lleva al organismo a entrar en estado de cetosis, o ketosis. Esto sucede porque se agota el azúcar y el cuerpo, que es muy listo y se adapta a todo, nos proporciona otra fuente de energía. Algunos ayunadores afirman sentir euforia e hiperactividad, mientras otros lo niegan y solo dicen sentir hambre. Sean cuales sean los síntomas, las cetonas se manifiestan por el mal aliento y un olor fuerte de la orina, y se supone que ayudan a quemar grasa. Lo que sí que es cierto es que cuando entramos en cetosis, por lo menos los priemros días, perdemos mucho peso, pero esto suele corresponderse con líquidos y no con grasa, ya que al agotarse el azúcar (glucógeno), el hígado suelta agua. Cada kilo de glucógeno puede liberar hasta 2 litros de agua. Así pues amigos, no os dejéis engañar por lo que marque la balanza y mejor fijaos en cómo os sienta la ropa. Vale, hasta aquí la teoría, ahora voy a hablaros de lo que siento yo, que no tiene nada que ver con lo que acabo de describir: relajación, un mareo muy agradable, sensación de que se me va la cabeza, y una sonrisa tonta que no sé a qué viene. Vamos que para mí el ayuno es como un colocón. Qué lástima no haber probado el éxtasis para comparar... xD En cuanto a Raúl y Soledad, pues ahí lo llevan, luchando contra el hambre y las tentaciones, y la verdad estoy muy orgullosa de ellos. No es que me guste que la gente que aprecio deje de comer y se joda la salud, es que lo prefiero a otros daños que pueden infligirse a sí mismos, como es dejarse llevar por esa zorra inmunda que es Mia... Muchísimas gracias a todos los que me apoyáis, vosotros alimentáis este blog, os quiero más de lo que podéis imaginar...

De compras por Madrid

Cuando no tengo dinero, veo un montón de cosas que me gustan... y cuando mis padres me llevan de compras, no encuentro nada apropiado: los vaqueros más baratos son enormes, las botas con tacón bajo son horrorosas (¿por qué no fabricarán zapatos bonitos sin tacón? ¡quiero andar no subirme a una pasarela!), lo único que no me causa problemas es la ropa interior... aunque he de admitir que mi busto ha descendido, ahora tengo la 90B.
Después de recorrer todo Bravo Murillo y cada una de sus zapaterías (hablamos de una calle de 3 km de largo), me decidí por unas botas blancas con tacón de casi 9 cm, pero ancho (oh oh, más de uno pagaría por verme correr escaleras abajo cuando se me escape el tren... ya veréis como la lío). Pensaréis que la dificultad para hallar unas botas de mi gusto y de mi limitado presupuesto dependen de mi exigencia y no de Ana, pero creedme que con este cuerpo deforme, todo se complica; a saber: piernas y brazos esbeltos, barriga de embarazada de 6 meses, cara alargada y busto mediano. Vamos que todas las botas se me caen a la altura del gemelo, por eso me las tengo que poner con los vaqueros remetidos por dentro, o con calcetines haciendo bulto como ya he llegado a hacer...
En cuanto a los vaqueros, solo tengo un problema que deriva en otro: me pone muuuy nerviosa probarme y que me quede pequeño, y claro me los tengo que probar sola y hoy estaba con mis padres, pero logré despistarles un rato.
Nota mental: asesinar a quien vuelva a mencionar que hoy en día la ropa moderna se hace para chicas esqueléticas y que las rellenitas no encuentran nada para ellas. Por lo menos en España, líder europeo en sobrepeso (vamos a la carrera detrás de México creo, yupiiiii por fin ganamos en algo!! ya que siempre nos desbancan en los mundiales de fútbol...)
Lo cierto es que la 40 (talla 8 estadounidense) abunda mucho más que la 32 (talla 0 estadounidense), y quien diga lo contrario es que tiene una 48 y se queja de que no hay 40 por quejarse de algo, ya que con ese cuerpo no hay nada que te quede bien, no pongas excusas que los fabricantes textiles no tienen la culpa de tu flotador.
Finalmente cometí una pequeña locura y me agencié unos jeans skinny (así llama Bershka a este modelo) color morado talla.. 32! La más pequeña. Se me ha ido la olla del todo, lo sé, pero no tenían la 34 así que tuve que elegir entre la 36, que ya me viene, y la 32, y pensé que esta última me daría ánimos para continuar el ayuno hasta sus últimas consecuencias. La foto es de unos vaqueros parecedisímos pero de Pimkie, y de la 34, la talla que debería haber comprado...
¿Creéis que me pueden valer en 4 semanas o soy una puñetera ingenua...?

viernes, 11 de septiembre de 2009

24 horas de ayuno

Bueno 24 horas para mí... porque Raúl y Soledad llevan más y la verdad me da le sensación de que no lo llevan muy bien. Desde aquí les transmito todo mi ánimo y mi cariño... ya estoy delirando otra vez ¿qué me creí? ¿que con 4 palabras vacías puedo animar a alguien? Noooo ni modo, eso ya me lo demostraron esta tarde... Para mí los peores momentos de un ayuno vienen las noches del primer y segundo día, después empizas a liberar cetonas en sangre y te sientes hiperactiva, hasta que te puede el agotamiento o la ansiedad o un ofrecimiento de tu pareja o el hambre, y accedes a comer. Entonces subes con una velocidad pasmosa lo que bajaste y te arrepientes mucho de haberte sacrificado tanto para nada... pero esta vez no nos pasará porque estamos los Tres Mosqueteros unidos verdad? Gracias por apoyarme, sois casi los únicos, los demás solo saben recordarme los riesgos que corro... lo cual me reafirmas más. Ciertamente no he sentido apenas hambre hoy, no me lo explico, como tampoco me explico un comentario de mi padre cuando le pedí que me llevara a comprar un suéter: "No es época de sueter, lo que pasa es que tú tienes frío porque comes mal, te voy a llevar al médico OTRA VEZ..." Dios mío dame un descanso. Que en 20 años no se haya preocupado por mí y ahora venga a decirme que como mal... Creía que con los atracones que me hicieron subir 2 kilos lo tenía un poco despistado, pero ya veo que subestimo la inteligencia de mi viejo. Como iba diciendo, que mañana me toca agenciarme unos vaqueros, nada de jerseys (órdenes del tirano que me mantiene, si él no tiene frío, naaaadie tiene), ya veremos cómo me las apaño con la talla... En España se parte de la 32, pero solo la tienen en tiendas de jóvenes como Bershka, Pimkie o Stradivarius, si te vas a una tienda de adultos la más pequeña es la 36 o la 38. Incluso la 40... que es la más grande que encuentras en Bershka. ¿Alguien lo entiende? Ya divagaré sobre el tema de las tallas otro día, ahora quiero concluir con un deseo: BUENA SUERTE CON SUS METAS

jueves, 10 de septiembre de 2009

Ayuno y muerte

Hoy estoy muy apática... jajajaja "hoy". ¿Por qué miento? ¿A quién trato de proteger? No te engañes princesita sin corona a nadie le importa que estés hecha una mierda, que seas una mierda, que tu vida sea una mierda desde hace un mes y medio... así que no lo maquilles anunciando que estás apática.
A lo que iba, ya imagino que lo que os ha traído a leer esta entrada es el tema del ayuno y no mi ausencia de ganas de vivir y sobre todo, la ausencia de valor de quitarme la vida. ¿Dije vida? Quería decir calvario. Acúsenme de dramatismo por favor. Recuérdenme cuantos niños en Africa se mueren de hambre y de crueles enfermedades, y no se quejan. ¿Quién pidió una de tópicos? ¡La mesa 7! Oh sí ya me siento mejor. Tengo 2 piernas y 2 brazos, con eso me basta para sentirme la más afortunada del mundo.
Me da pavor la posibilidad de despertar en un psiquiátrico, de quedar discapacitada, de que mi familia piense que solo fue un intento de llamar la atención, en fin, de no lograrlo. La existencia se vuelve aún mas tormentosa tras un intento de suicidio, así que hazte con cianuro u olvídate.
¿Confieso otro miedo? El de perderme algo. Sí, estar cerca de algún suceso bueno, y perdérmelo por no haber tenido la paciencia de resistir un poco más... excusas para mi puta cobardía, para no tener arresto suficiente de tomar el reisgo, y si fallo, volver a intentarlo hasta que lo consiga. Al fin y al cabo, nadie es inmortal ¿verdad?
Quiero unir mis ansias de desaparición con mi trastorno alimentario (llamémoslo así), así que hoy, 11 de septiembre de 2009 (vaya ironía con la fechita) inicio un ayuno indefinido, ojalá que eterno, aunque no tengo ni idea de cuánto aguantaré ya que mi récord es de tan solo una semana.
Quien quiera unirse a mí, que me deje un comentario en esta entrada o me lo comunique por correo, abstenerse wannabes por favor.

Tips anti-ansiedad

Estos tips son los que sigo yo cuando tengo ansiedad por comida, eso no significa que os valgan a vosotrosm, ni q sean saludables.. de hehco voy a confesar uno que nunca le había contado a nadie, pero que tiene que ser perjudicial para los intestinos a la fuerza... Si tenéis ansiedad emocional ni lo intentéis, es inútil, ese agujero no lo llena nada que te metas por la boca. -Agua helada: beeb toda el agua que puedas, hasta que no te quepa ni una migaja de pan. Después da vueltas sobre ti mismo y maréate. Con las náuseas se te quitarán las ganas de comer. -Bebida caliente: té, café, agua con limón, caldo desgrasado (Gallina Blanca), cualquier líquido caliente ingerido con celeridad sacia muy rápido. Incluso puedes tomar leche, ya sé que tiene calorías, pero más calorías te vas a meter entre pecho y espalda si te metes ese atracón que estás deseando... -Leche muy caliente con cacao: un vaso de 200 ml con 10 gr de cacao pueden suponer 100 calorías, pero es algo que me permito si tengo verdadera hambre, porque enseguida la sensación de estómago cerrado me acosa y no puedo comer aunque quiera. Vamos, que no me sienta muy bien la leche con cacao... pero sirve contra la ansiedad. -Contar hasta 20 despacio. Imaginarme saboreando lo que me provoca ansiedad. Antes de terminar, me doy cuenta de que tampoco lo deseo tanto, que es un capricho pasajero, y que cuando termine el placer del sabor (5 min??), me arrepentiré mucho. Cuando has acabado de comer no te queda NADA, ni la comida ni el placer ni la dignidad. Un segundo en tus labios, una eternidad en tus caderas... -Mirar fotos de cuando estaba más gordita, eso me limita mucho, porque le tengo fobia... pasar de los 60 kilos no es algo que se olvide tan fácilmente. En eso me transformó esa galleta que anhelo. ¿Dije anhelo? Quería decir "no gracias, no me gustan los dulces" -Mirar fotos de personas que admiro y no sólo por su delgadez, sino por su éxito profesional (no sé cómo se me coló ahí Pete Doherty en la columna de la derecha xDDD). Si ellos pueden, ¿por qué yo no? No escuches a los que te dicen que los trastornos alimenticios te destrozan la vida y que te dejan sin nada, eso es sí te dejas llevar por ellos, cosa que está fuera de mis responsabilidad. ¿La belleza está en el interior? ¡No sabía que a Julia Roberts le pagaran las millonadas que le pagan por buena persona! Vamos no me jodas... -Si de lo que tienes ganas es de atracón y no te importa de qué, hazlo, pero con lechuga o como mucho, fruta. Coge una lechuga y cométela hoja por hoja, hasta que te duela tanto el estómago o te sepa tan mal la boca (no estoy a dieta, es que me encanta la ensalada!! hmmm qué rico sabor a hierba...) que no puedas más. Cuando empieces con ella piensa que después comerás chocolate o lo que te apetezca, pero créeme, antes de haber llegado al final, solo tendrás ganas de tumbarte en postura fetal y esperar a que se pase. Yo me he llegado a comer una cabeza de brócoli entera.. y duele. -Si tienes mucho autocontrol, simplemente no pienses en las calorías, come un poquito de lo que te apetece y te darás cuenta de que no tiene un sabor tan maravilloso, es solo que habías IDEALIZADO ese sabor porque no te lo permitías a ti mismo. No seas más estricto de lo que puedes soportar, acabarás con atracones y lo echarás todo a perder. -Imagínate con el cuerpo soñado. El peso soñado. Recréate en esa imagen. ¿De verdad unos macarrones con tomate importan más que eso? ¡Pues adelante no dejes ni uno! -Decide caer en la tentación, pero más adelante. Si son las 6, decide que comerás a las 7. Si a las 7 aún sigues ansiosa, pues come pero con orden y concierto, respetando la porción, masticando despacito y bebiendo mucha agua. Pero creo que en una hora habrás tenido tiempo de considerar otras alternativas. -Haz ejercicio. El deporte es el mejor amigo de la salud, tanto física como psicológica. Liberas hormonas de la felicidad, te distraes, y encima quemas calorías. ¿Qué más se puede pedir? -Mírate al espejo y pésate. Evalúa tu cuerpo. ¿Puede esa chicha que te sobresale de la cadera admitir 500 calorías más? Si es así, consúmelas ahora que nadie te ve, ¡corre vete a la cocina como una fugitiva y date a la grasa como un fumador de crack a su vicio! -Come celulosa. Así como lo oyes. Pañuelos de papel, papel higiénico, algodón, servilletas. Algunas de estas cosas contiene elementos tóxicos como cloro o petróleo. Pero cuando sientes el estómago vacío y un rugido que amenza con llamar la atención de los compañeros de clase... he llegado a comer hojas de cuaderno por no disponer de ninguno de los otros métodos. Por la puta ansiedad. Así que si no quieres llegar al extremo de comer TINTA ASQUEROSA (sabe fatal), por favor vete al puto médico de cabecera y que te mande a dieta. Si no resulta, te mandará al endocrino. Y sí, todo esto requiere paciencia y esfuerzo. Adelgazar te costará paciencia y esfuerzo. ANA NO ES UNA DIETA. MIA NO ES UNA DIETA. Son trastornos mentales que pueden llegar a ser tomados como estilo de vida, que te harán caer en hábitos que no confesarías ni a tu gato, y que espero poder ser capaz de confesar algún día, ya que lo de comer papel en clase o en el baño es lo más suave que he llegado a hacer. No me pidas consejos para bajar 4 kilos en una semana porque el sábado tienes un cumple, esto no funciona así, no puedes ser anoréxico una semana y luego dejarlo, esto engancha, ANA engancha, MIA engancha, y si estás atrapada entre las dos, ya ni te cuento. No doy lecciones morales, no soy quien, solo aconsejo que busques otros métodos menos dañinos... a fin de cuentas, ¿quieres ser feliz siendo más delgado, no es cierto? Pues dudo que encuentres a alguna persona con trastornos alimentarios q sea feliz. Puse el ejemplo de Julia Roberts como puedo poner el de cualquier otro, ni siquiera sé si es anoréxica o no, solo afirmo que para recibir algo, tienes que sacirficar algo, así que, decídete ahora que aún estás a tiempo... ¿qué estás dispuesta a dar?

martes, 28 de julio de 2009

Dieta de 500 calorías mixta

Esta dieta se parece bastante a la anterior, sólo que aporta una pequeña cantidad de proteínas y no contempla un tentempié a media mañana. -Desayuno: cualquiera de los de "Dieta vegetariana" -Almuerzo; elegir entre los siguientes: 1)Plato grande de ensalada verde (200 g) aliñada con vinagre de manzana+ 250 g de pechuga de pollo a la plancha sin aceite y salsa de soja o limón o pimienta negra 2) Judías verdes hervidas (150 g)+ filete de pescado blanco cocinado sin aceite (160 g). Un yogur desnatado de frutas . 3) Revuelto de espárragos verdes (150 g, o sea media docena aprox) con un huevo y taquitos de salmón (100 g)+ una cucharada de margarina light. Un yogur desnatado natural. 4) Ensalda de lechuga, tomate, cebolla, pepino, zanahoria, remolacha (200 g) con 2 rodajas de piña de lata, una cucharada de maíz, tiras de fiambre de pavo (40 g), 2 palitos de cangrejo (40 g)+ salsa de yogur (una cucharada de yogur desnatado+ un chorro de vinagre+ un chorro de edulcorante, todo batido). Lo que te sobre del yogur con un par de fresas picadas. 5) Cualquier carne extra magra (lomo de cerdo, filete de ternera, pechuga de pollo o de pavo, etc) al vino: 200 g de carne a la plancha con un chorro de limón, otro de vinagre y otro de vino, hasta que reduzca. Una rodaja pequeña de sandía. Vosotros podéis inventar vuestras propias recetas, siempre y cuando incluyan verduras o frutas y proteína magra, y quizás algún lácteo desnatado, y no superen las 300 cal claro. Merienda: té o infusión o café solo+ 3 ó 4 fresas, o un tomate pequeño, o media manzana, o una mandarina pequeña, o 4 uvas, o una rodajita de piña. Cena: elegir entre las siguientes opciones: -Un huevo hervido+ ensalada pequeña de lechuga, pepino y limón -Ensalada verde grande (200 g) con 2 cucharadas de vinagre balsámico -Sopa desgrasada (330 ml)+ un yogur de frutas -Salteado pequeño de verduras variadas (150 g) en una cucharadita de margarina light. -Plato mediano (250 ml) de crema de verdura sin grasas ni leche -100 g de jamón york (4 lonchas aprox) -Cualquier plato de verduras que no supere las 100 cal.

Dieta vegetariana de las 500 calorías; desintoxicante

Esta es la dieta que yo sigo cuando me atasco en la pérdida de peso, aunque no tiene por qué funcionarle a todo el mundo como a mí. Si detestas la fruta y la verdura, olvídalo, pero si te gustan, podrás perder hasta un 5% de tu peso corporal a la semana, en función del ejercicio que hagas y de tu ritmo metabólico. Un 5% son 3 kg para una persona de 60 kg. -Desayuno (100 cal); elige entre: -Una manzana grande (225 g). -Medio kg de sandía (2 ó 3 tajadas). -Tazón de fresas (300 g). -Un plátano mediano. -Dos melocotones medianos. -3 ó 4 mandarinas. -Una pera grande (170 g). -Dos naranjas pequeñas o una grande (120 g). -5 ó 6 almendras. -10 cacahuetes. -4 ó 5 nueces. -Un puñadito de pistachos. -Cualquier otra fruta que no supere las 100 ca.l También se pueden mezclar distintas frutas para hacer una macedonia o un batido, por ejemplo 100 g de fresa+un cuarto de manzana+media pera, o una tajada fina de melón+medio vaso de zumo de naranja+150 g de sandía+hielo. -Media mañana (50 cal) un lácteo desnatado, a elegir entre: -Un yogur -Medio vaso (125 ml) de leche -Un café con leche y edulcorant -25 g de queso light -50 g de requesón o de tofu -Almuerzo/comida (200 cal); elige entre: -Ensalada grande de lechuga, pepino y tomate (250 g entre todo), con una cucharada de maíz y otra de pasas, aliñada con vinagre balsámico (2 cuharadas soperas). Un yogur desnatado de fruta -Salteado de verduras (250 g): judías verdes, cebolla, berenjena, repollo, brócoli, espinacas, acelgas, etc, con una cucharadita de aceite de oliva o una cucharada de margarina light. Un yogur desnatado natural -Ensalada de frutas: 100 g de lechuga, un tomate pequeño, un cuarto de manzana rallada, una pera de agua enana, tacos de sandía, aliño de yogur (un tercio de yogur desnatado batido con una cucharada de vinagre, otra de limón, y un chorro de edulcorante líquido). El resto del yogur con una cucharada de mermelada -Revuelto de champiñones: 200 g de champiñones laminados+ una cucharada de garbanzos hervidos+ unas hojas de espinaca+ media cebolla picada+ 2 cucharadas de margarina light También puedes inventar tus propias recetas de ensaladas y verduras, siempre que no superen las 200 cal y sean variadas, para asegurar el aporte de todas las vitaminas y minerales. -Merienda: té o café solo o agua con limón o refresco light. -Cena (150 cal máx); a elegir entre: -Puré de verduras (250 g), por ejemplo 150 g de zanahoria+ 100 g de patata -Sopa de verduras con una cucharada de pasta (en crudo, unos 20 g) -Ensalada (grande) variada de lechugas aliñada con vinagre de manzana -Huevo hervido con medio plato (100 g) de menestra de verduras Un beso de limón, MARINA.

lunes, 27 de julio de 2009

Dietas

En este apartado vamos a hablar de dietas y a aclarar ciertos términos, como: -Kilocaloría: 1000 calorías. Normalmente tomamos el término caloría por el de kilocaloría, a la que en adelante denominaremos cal. Una cal es la unidad de energía más utilizada, junto con el Julio, y supone la cantidad de la misma precisa para elevar 1º C la temperatura de un litro de agua. Un organismo femenino medio, menor de 30 años, necesitará 2000 calorías para cumplir correctamente sus funciones, y uno masculino, 2500. -Hidrato de carbono o glúcido: cualquier tipo de azúcar, ya sea complejo (harina, cereales, pan, leche, legumbres, patata, boniato, pasta...) o simple (dulces, fruta, hortalizas, verduras en pequeña cantidad, bollería industrial...). Cuando ingieres hidratos pasan a la sangre para proporcionar energía, pero si no se consumen, los que sobran se convierten en grasa. Cada gramo contiene 4 cal. -Grasas o lípidos: aceite, mantequilla, la parte blanca de la carne y del pescado, frutos secos... Existen 2 tipos de grasas, las saturadas (suben el colesterol y atoran las arterias, se presentan en los productos animales, lácteos y huevos), y las insaturadas (las buenas, como las del aceite vegetal, frutos secos, pescado azul), que a su vez se dividen en monoinsaturadas y poliinsaturadas. Los lípidos son los encargados de almacenar la energía y de muchas otras funciones de protección del organismo, el problema llega cuando se produce un exceso de grasa, entonces este la almacena bajo la piel. Se comsidera que una mujer media debe almacenar un 17-24 % de grasa, y un varón, un 11-19%, ya que ellos tienen más músculo y los huesos más anchos. Un gramo contiene 9 cal. -Proteínas o prótidos: carne, pescado, lácteos en baja cantidad, queso, huevos, legumbres, soja y derivados. Son las encargadas de reparar los tejidos y de la formación del músculo aunque un exceso puede dañar los riñones y el hígado. Cada gramo contiene 4 cal. -Dieta hipocalórica: la que es baja en calorías. -Dieta hiperproteica: la que es alta en proteínas. -Dieta hipoglúcida: la que es baja en hidratos de carbono. -Dieta desintoxicante: la que pretende desintoxicar el organismo de toxinas como las provocadas por los radicales libres, para ello elimina los productos refinados (harina blanca, azúcar...), la cafeína, la teína, el tabaco, los alimentos procesados, reduce la sal, y aumenta el consumo de vegetales frescos y de temporada, a ser posible que no hayan sido tratados con químicos. -Tasa metabólico basal (TMB): cantidad de energía que consume el organismo en reposo, es decir; las calorías que quemaríamos si nos pasáramos las 24 h durmiendo. Depende de la edad, del sexo (los hombres gastan más que las mujeres incluso en reposo, por eso pueden comer más sin engordar :/), y de la persona. Por eso tenemos amigas que comiendo el triple que nosotras están más delgadas, porque su TMB es más alto. ¿Cómo podemos acelerar el metabolismo? Con ejercicio, cafeína, teína y en general las sustancias excitantes, y sobre todo, aumentando nuestra masa muscular, porque el músuculo consume energía hasta sentado en el sofá. Lo malo es que cuantas menos calorías comamos, más lento se hace el metabolismo para compensar este déficit. Además con las dietas rápidas se suele perder grasa y músculo, con lo cual después engordaremos más fácilmente. En definitiva, si no le echas gaslina al coche, este la ahorra para que le dure más, y si reduces el tamaño de su motor (nuestro motor es el músculo), menos consumirá y más le durará la gasolina... por eso cada vez es más y más difícil adelgazar, nuestro cuerpo se aferra a la grasa y a las calorías como puede, porque no sabe cuándo le vamos a dar más. Un dato MUY IMPORTANTE es que el cuerpo solo puede metabolizar 600 calorías a la vez, por lo que si haces una comida de 800, las 200 restantes se convierten en grasa. Es mejor hacer 4 comidas de 200 calorías que una de 800. Cuanto más comas más activarás el metabolismo. De hecho, un obeso mórbido puede comer más de 3000 calorías sin hacer nada de ejercicio, y no engordar. ¿No es paradójico? -Índice de masa corporal o Body mass index (IMC o BMI): relación peso-estatura. Se obtiene a través de una fórmula muy sencilla: peso (kg) / estatura (m) al cuadrado. Es decir una persona de 1,70 m y 65 kilos, tendrá un IMC de: 1.70x1.70=2.89; 65/2.89=22,5. Según la OMS, los índices: -Inferior a 12: límite incompatible con la vida. Esto no significa que haya que llegar a 31 kg con 1,60 m (eso seria un IMC de 12,1) para morir, a la vista está que se puede palmar con más peso). -Inferior a 16: deficiencia nutricional permanente, es decir; que la has cagado. Suele ser criterio de hospitalización y conlleva consecuencias crónicas, como la bradicardia (pulso lento), la disminución del tamaño del corazón, etc. 45 kg con 1,67 significaría un IMC de 16,13. -Entre 18 y 19,9: delgadez. Los médicos no se ponen de acuerdo a la hora de definir la barrera entre mera delgadez y enfermedad, pero se suele diagnosticar anorexia cuando el IMC baja de 18,5, o sea, unos 44 kg para alguien de 1,54 m. Las altas hospitalarias también suelen darse cuando se alcanza un IMC de 18 o 18,5. -Entre 20 y 24,9: peso ideal, el que entraña menos riesgos de accidente cardiovascular y de enfermedades. No obstante, este es un baremo muy amplio y ha de tenerse en cuenta que, a mayor edad mayor peso, y que esta es la opinión de la OMS, pero para mí una chica de 1,72 m y 71 kg (IMC 24) me parece gorda, y probablemente tendrá el colesterol alto y exceso de grasa corporal. Además estas medidas no son aptas para deportistas, de hecho Arnold Schwarzenegger presenta un IMC de 30 y no está gordo precisamente, sino hiper-musculado. -Entre 25 y 27,4: sobrepeso ligero. No tiene por qué entrañar riesgos graves para la salud, depende de la persona; algunas con 1,76 m y 80.500 kg (IMC 26) están como una rosa mientras que otras sufrirán de hipertensión... -Entre 27,5 y 29,9: sobrepeso preocupante; preobesidad. Hay que ponerse a régimen ¡ya! -Entre 30 y 34,5: obesidad tipo I. Riesgo de enfermedades cardiovasculares, reducción de la esperanza de vida. Se plantea la medicación añadida a la dieta y al ejercicio. -Entre 35 y 39,9: obesidad tipo II. Riesgo elevado de enfermedades cardiovasculares, se dificulta la movilidad y facilita el sedentarismo, produciendo a su vez el aumento de peso. Empleo de medicamentos como anorexígenos (supresores del apetito), incluso de apoyo psicológico y/o psiquiátrico. Puede existir algún trastorno de la conducta alimentaria, como el de comedor compulsivo, comedor noctámbulo, síndrome de Prader Willy... 96 kg para una mujer de 1,59 m supondrían un IMC de 38. (Dios qué miedo) -Superior a 40: obesidad tipo III u obesidad mórbida. Riesgo de muerte, se considera la cirugía bariátrica como última opción. Un IMC de 44 podría corresponderle a un chico de 120 kg y 1,65 m. (El miedo se convierte en terror) Esto es sólo una guía, el que mejor os podrá orientar sobre cuántos kg necesitáis perder será vuestro médico, aunque yo no me fío mucho de ellos desde que me metieron glucosa en vena y 1000 perrerías más que ya iré contando... En las próximas entradas publicaremos dietas de adelgazamiento, pero no las típicas que aparecen en las revisas como "la Dieta de la Manzana" y tonterías así, nosotras queremos dar regímenes que ya hemos probado, para asegurar su eficacia, aunque no garantizamos que sean las mejores para la salud... sólo sirven para rebajar kilos. Si quieres prevenir la osteoporosis vete a un portal de salud, esto es una web pro-ana ¿qué te creías? Nadie dijo que fuera fácil... Un beso de limón, MARINA.

domingo, 26 de julio de 2009

Dejar de comer y vomitar

Si sales a la calle a realizar una encuesta sobre trastornos de la conducta alimentaria, 4 de cada 5 personas te los definirán así: anorexia es dejar de comer, y bulimia es atracarse y vomitar. Nada más lejos de la realidad. La restricción alimenticia y los métodos compensatorios, como purgas, ejercicio o laxantes, son la consecuencia del diablo que inunda la cabeza de millones de personas, pero no constituyen el demonio en sí. La anorexia y la bulimia -Ana y Mia para abreviar- implican un grado de malestar extraordinario que no siempre está relacionado con los datos cuantitativos: peso, altura, edad, perímetro de cintura, etc. Es decir; no eres más anoréxico por estar más flaco, eres anoréxico cuando: -Te odias tanto a ti mismo/a que eres capaz de herirte. -Te horrorizas cada vez que te ves de refilón en un espejo. -La cuenta de calorías te resulta inevitable. -Te sientes mierda después de comer, o incluso al pensar en comida en cualquiera de sus formas: su compra, su preparación, su cocción, su ingesta, su devolución... -Cada día te ves más gordo/a y darías lo que fuera por adelgazar, incluso la vida. -Piensas que cualquier esfuerzo vale la pena, y no solo por mejorar tu físico, sino para perfeccionar todos los aspectos de tu vida: laboral, estudios, familiar... Quieres ser perfecto/a en todo: la amiga perfecta, el futbolista perfecto, la estudiante perfecta, el hijo perfecto, la secretaria perfecta, el ingeniero perfecto, la cocinera perfecta, el enfermero perfecto, la bailarina perfecta, el amante perfecto, la conversadora perfecta, el informático perfecto, la nieta perfecta, el sobrino perfecto... y cuando esto no sucede te sientes inútil y te propones mejorar. Tu nivel de auto-exigencia es siempre muy superior al de exigencia a los demás. -Las metas forman parte de tu cotidiandad. Necesitas de esa ilusión que supone el imaginarte habiendo sacado un 10 en Matemáticas, tras haber bajado 10 kilos o realizando 10 minutos más de abdominales de los que sueles hacer. Resumiendo, anhelas ser la chica 10. -Seguir una rutina se convierte en esencial para ti, ya sea desayunar cada mañana lo mismo, hacer 50 sentadillas todas las noches, cepillarte los dientes 3 veces, provocarte el vómito cuando la ingesta ha superado las 200 calorías, lavarte el rostro con 4 productos diferentes, estudiar un mínimo de 9 horas a la semana, o comer siempre a la misma hora. Te pone nervioso que tu rutina se vea alterada, y crees que vas a subir de peso por haber desayunado leche en lugar de una naranja, o que vas a suspender Historia por haber estudiado 7 horas en lugar de 9. -Necesitas la aprobación de los demás, sobre todo de los más allegados, resultando su opinión más importante que la tuya en ocasiones: tu amiga te insinuó que esa camiseta no te quedaba bien así que no te la pones aunque a ti te gustaba; te encantaría pintarte el pelo de rubio pero tu pareja comentó que le gustaban más las morenas; mamá piensa que las Ciencias tienen más salidas que las Letras, así que eliges la carrera de Biología aunque tu verdadera vocación era Periodismo; celebras tu cumpleaños en esa discoteca que no te agrada del todo porque es la preferida del grupo... se me ocurren demasiados ejemplos, soy experta en anteponer las necesidades ajenas a las mías propias y en complacer a la gente. -Parece que la felicidad nunca va a ser para ti y que hagas lo que hagas, cumplas los objetivos que cumplas, nunca es suficiente. -Lloras a menudo y a veces sin motivo aparente. La tristeza se ha apoderado de tu vida. -Crees que tu imagen tiene mucho que ver con tus éxitos, más que la inteligencia o que cualquier otra cualidad. -Antepones el cuidado físico al cuidado de otros aspectos de tu persona: no vas a comprarte ese cuaderno que necesitas por depilarte las cejas, dejas de ir al cine con Carlos para visitar el gimnasio por 5ª vez esta semana, prefieres perderte tu programa favorito de la TV antes que tu sesión de flexiones, llegas tarde a clase antes que presentarte sin maquillar... -Gastas cantidades de dinero que antes te parecían inimaginables en cosas como crema anticelulítica, pastillas supresoras del apetito o una faja reductora, aun cuando eres una muy ahorradora para otras cosas. -Cuanto menos comes, más satisfecho te sientes. -El mayor halago para ti es que digan que has adelgazado, o que te pregunten qué dieta sigues para lucir ese tipazo. -Te obesionan las cifras: kilos, libras, centímetros, número de calorías de una pechuga de pollo... -Temes engordar más que cualquier otra cosa, a veces tienes pesadillas en las que has subido de peso o te has zampado una hamburguesa con queso. -Te dan miedo los alimentos calóricos, de hecho, cualquier alimento. -Te sabes de memoria las tablas nutricionales mejor que cualquier endocrino. -Te crees incapaz de comer más de la cantidad adecuada, sería demasiada presión. O por el contrario, en ocasiones empiezas a comer y te sientes incapaz de parar. ... Estos son solo algunos de los patrones que tenemos en común las personas con Ana y Mia; no obstante no hay que compartirlos todos para presentar una anorexia. Solo son ejemplos de nuestro estado de ánimo, el cual nos conduce a dejar de comer o a purgarnos, Y NO AL REVÉS. Una persona feliz y sana no restringe su dieta de esta manera porque le dé la gana, han de preexistir algunos factores, como los arriba mencionados. La anorexia y la bulimia son trastornos MENTALES que dan lugar a consecuencias físicas y nunca al contrario. Espero no haber dado lugar a confusiones, si alguien tiene alguna duda que nos lo comente. Luna y yo daremos nuestro punto de vista y trataremos de ser objetivas dentro de nuestras claras limitaciones, obvio que no podemos ser imparciales en un asunto que nos afecta tanto. Un beso de limón, MARINA.